Estoy buscando un confidente, un amigo incondicional,
alguien que no tenga miedo a decirme mis errores y defectos pero que también sea
capaz de notar y resaltar mis virtudes y atributos. Alguien que pueda enriquecer
mi vida con su presencia y me permita devolverle lo mismo a cambio, después de
tanto tiempo, hay mucho que dar.
Antes de que decidas creo que necesitas conocer mi
historial, todas las personas deberían venir con un currículo social antes de
llegar a nuestras vidas, ayudaría saber que esperar.
Nunca he tenido a alguien que pueda ser un amigo real, uno
que quiera ser mi amigo. Tengo dos problemas para conseguirlo, el primero es
que parece que no agrado mucho a las mujeres y el segundo es que los hombres
cercanos a mi siempre parecen malinterpretar mis intenciones y terminan odiándome
o termino haciéndoles daño.
Así han sido los últimos años pero no siempre fue así. Pero comenzaré
desde el principio, créanlo, será una historia corta.
Durante mi infancia no hubo muchos amigos, siempre estuve
acompañada de mi hermano dos años menor, no tuve amigos en el preescolar y
tampoco cuando inicié la primaria. Recuerdo a Cinthia y Alma, después a una nueva
Alma, o quizás olvide su nombre, después a Carolina y a la única que pasó
suficiente tiempo conmigo para poder decirse amiga mía, Mónica, hasta recuerdo
sus apellidos que pos supuesto no voy a proporcionar, fue cosa de dos años, dos
años de juegos y travesuras pero aunque pudo trascender no fue así, deje el
lugar y perdimos contacto.
Vino la secundaria, de donde recuerdo a tres personas Judith
y Dayeni, con quienes al partir perdí contacto también. Y Jessica, quien vive
muy cerca de mi casa, a la vuelta de la esquina, pero solo teníamos una cosa en
común, que tomábamos clase juntas, es todo, cuando eso termino, también el
contacto.
Después la educación media superior, ahí conocí a personas
que se hicieron más cercanas, pero no por mí, sino por ellos. Conocía a
Trinidad, Maricela y Arturo a quienes aún veo. Pero como dije son relaciones
basadas en ellos, me cuentan todo, les ayudo con sus problemas, les doy mi opinión, los acompaño cuando celebran y cuando están
deprimidos aunque se hizo un poco difícil cuando terminamos la escuela y cada
quien tomo su rumbo, pero mantenemos contacto.
En la universidad hubo tres
personas que siguen ahí, están Poncho, Toño y Oliva. La situación resulto más
intensa con ellos. Poncho y Toño llegaron a mí por culpa de Oliva, ambos
estaban enamorados de ella pero ella nunca correspondió aunque la historia fue
mucho más larga que eso. Poncho después fue pretendiente mío pero él nunca me
interesó de esa forma y además yo estaba con alguien, pero él lo superó, tuvo
varias novias y ahora está a punto de casarse, cree que encontró a la indicada,
la manera en que comenzamos a ser amigos impidió que me abriera mucho con él y después
simplemente yo seguí siendo su amiga igual que antes. Toño es una persona
complicada, difícil de tratar y quien también terminó enamorándose de mí, yo
seguía con alguien y además no estaba interesada en él de esa forma, la
diferencia es que él no lo superó y tuve que alejarme para no lastimarlo. Oliva
fue una historia diferente, ella era mi cómplice y yo la suya, llegó a mi vida
por la fuerza, ella me obligó a ser su amiga, llego simplemente y asumió que
nos conocíamos de toda la vida y después solo fuimos amigas por 7 años, nos contábamos
todo aunque no siempre era al momento, pero de repente lo que parecía tan
sólido termino por un absurdo rumor con su ex novio; en fin, ella pidió que le
dejara de hablar y lo hice, me ofendió que no confiara en mí, que creyera lo
que sea que le hayan dicho, que no me escuchara aun cuando le asegure que no
sabía de que hablaba así termino con ella. Poncho y Toño aun siguen en contacto
pero desde que dejamos la escuela casi no hablamos.
Conocí a alguien nuevo, J. es una
relación simple pero frágil, lo que la vuelve complicada. Yo sigo en la misma
relación, con la misma persona, y ahora él es mi mejor amigo, pero no es lo
mismo.
Así que busco un amigo o amiga, y
siendo sincera, no soy optimista al respecto… La amistad es tan difícil de
encontrar como el amor y la felicidad…